Desde una cárcel de EE. UU. el extraditado ex paramilitar aseguró que los miembros altos rangos de las Fuerzas Armadas fueron claves en el plan de Carlos Castaño para asesinar al periodista.
‘Don Berna’ volvió hablar y duro. Tres años tuvieron que pasar para que el exjefe paramilitar Diego Fernando Murillo Bejarano volviera a rendir una declaración sobre los hechos que encierran la planeación y la ejecución del asesinato del periodista Jaime Garzón.
A dos días de que se completen ya 16 años del crimen, 'Don Berna' declaró desde su centro de reclusión en Estados Unidos, este lunes, ante una comisión especial de la Fiscalía que viajó expresamente para oír los detalles que puedan esclarecer un crimen que sigue grabado en la memoria de los colombianos.
Murillo Bejarano contó a los fiscales del caso, en una diligencia que duró cinco horas, que “altos mandos oficiales colaboraron con la inclusión de los miembros de la banda La Terraza en el crimen, como por ejemplo el ex subdirector del DAS José Miguel Narváez. Incluso habló sobre una instrucción que les dieron en Bogotá para que prepararan muy bien los movimientos y lograr cometer el asesinato del periodista Jaime Garzón”, según detallaron fuentes cercanas del proceso a Semana.com
Dicen los que estuvieron en la diligencia que en esta nueva declaración se aportaron nuevos detalles que van alimentarán el proceso. Algo que, muy posiblemente, desencadenará el llamado de más personas a responder por el asesinato.
La última vez que 'Don Berna' se refirió al asesinato de Jaime Garzón fue en el 2012, tiempo en que vinculó a Narváez con el plan que orquestaron los jefes paramilitares para atentar contra el periodista y humorista.
Narváez permanece recluido en Facatativá (Cundinamarca) por este caso y también por el homicidio del senador de la Unión Patriótica Manuel Cepeda Vargas, padre del congresista Iván Cepeda. El proceso está ahora en la etapa de juicio en los juzgados especializados de Bogotá.
El último hecho en el caso, que representó un golpe para la familia Garzón, tuvo que ver con que un fiscal delegado ante el Tribunal Superior de Bogotá en junio pasado decidió que el asesinato no podía ser declarado de lesa humanidad porque no ocasionó “un perjuicio directo a una colectividad con características étnicas, religiosas o políticas”.
Lo cierto es que después de tanto tiempo, hasta el momento la Fiscalía sólo tiene un acusado por el crimen de Jaime Garzón, y se trata del exjefe paramilitar Carlos Castaño, que ya falleció.